miércoles, 27 de agosto de 2014
agée
me hago mayor. supongo que es esa la razón por la cual detecto cosas que antes no detectaba. si en su día les hablé del ruido que hacen los zapatos en ciertas salas de exposiciones, resaltaré ahora que me parecen muy pequeños, -excesivamente pequeños- los cartelitos que acompañan a los cuadros en las expos. ahí estamos todos (con más o menos diopotrías) realizando el mismo ritual: te acercas, miras, con el rabillo del ojo compruebas que no estás tapando el cuadro a los que sabes que también están mirando....te echas hacia atrás....y es cuando descubres que también los focos puede que no estén bien orientados. los marcos de algunos cuadros, tan barrocos, con sus volutas y relieves tan abundantes, a veces se desparraman (su sombra) hasta casi la mitad del cuadro que miras, todo porque los focos están mal orientados.........soy mayor.
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