sábado, 17 de marzo de 2012

la mochila de la bici

acabo de acordarme. cuando era pequeño llevaba dentro de la mochila que colgaba del soporte de su bicicleta, unos limones secos. se habían consumido en el frutero. en realidad fueron los grandes olvidados. comimos la fruta que los rodeaba en varias ocasiones, es decir: se repusieron las frutas gastadas muchas veces y aquéllos ahí seguían; despreciados una y otra vez hasta que quedaron como de cuero. (es algo que sucedió sin más, que he vuelto a intentar y que no ha dado resultado). y cuando alguien le preguntaba (al pequeño) qué era aquello, él contestaba: "son limones", así sin más; como quien lleva el periódico, o lechugas, o un par de zapatos en la mochila colgante de su bicicleta.

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